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Domingo 5 de mayo: la extradición en Ecuador.
Michael Fitzpatrick asumió la embajada en junio del 2019 y es un funcionario frontal. Sus declaraciones sobre corrupción y narcotráfico estremecieron al Ecuador
La ciudadanía en general pedía a gritos acciones de los elementos militares y policiales en las calles...
Si bien estos proyectos tuvieron un incipiente control en la construcción, nunca hubo en las etapas de factibilidad y diseño.
Lo que es una estupidez del tamaño de una catedral es obligar a decir o escribir palabras o prohibirlas.
Deliberado o no, la economía y nuestra vida en el 2024 dependerá de lo que pueda llover en el mes de mayo...
Si los delincuentes siguen gozando de sus fortunas, el mal de la corrupción se fortalece.
Se necesitan correctivos señor presidente, tanto en lo humano como en la generación de energía eléctrica.
Una forma de honrar a la República es hablar a veces de temas esenciales, distintos de la esterilidad política...
Solo tu voto puede poner freno a esta deriva.
Si lo dicho fuese un error, no estaríamos como estamos, sin luz, sin carreteras, más pobres, sin futuro...
(...) lo más lamentable, que un expresidente ecuatoriano trate de buscar que se sancione a su país...
(...) quizás hasta podamos ser otro pueblito mágico en la Costa de nuestro querido Ecuador.
(...) promuevan las diligencias para que esos casos no queden impunes y se sancione a los que tramaron, ejecutaron y encubrieron los asesinatos.
Lamentablemente este mal endémico, que afecta a todos, tiene varias raíces, con diez mil cabezas, difíciles de erradicar...
La mejor solución para combatir la migración indocumentada es invertir en las zonas de expulsión de migrantes.
No callaré y mi aguda pluma no dejará de hincar mi conciencia, para urgirme reclamar con mis escritos.
En el sector judicial la aplicación de la ley con celeridad es una forma de contribuir con las ciudades...
Es urgente que se defina una política internacional clara para recuperar el prestigio del Ecuador.
México fue el único país que se opuso al crédito de $ 800 millones de la CAF. Una “pataleta” más de López Obrador.