El último adiós para el diseñador Luis Tippán se desarrolló la tarde de este miércoles 27 de marzo. Familiares y amigos organizaron una emotiva misa luctuosa que contó con una urna que contenía las cenizas del fallecido creativo, que dejó de existir la mañana del martes 26 de este mes. Tal como había sido su deseo antes de morir, sus restos fueron cremados.

El encuentro ocurrió en la iglesia San Gabriel, en el norte de Guayaquil, tal como mostró un reporte del programa Los hackers del espectáculo. El reportero Dierter Hoffman, que asistió a la misa, mostró sus condolencias a los parientes de diseñador de modas, a quien le sobrevive su madre Rosita, de quien se aduce tiene alrededor de 90 años, y su hermana. Ambas agradecieron el gesto, así como los pésame de cada asistente.

“Se luchó hasta donde se pudo y creo que el de arriba fue el que decidió, porque se luchó hasta lo último. Estuve día y noche ahí (con él). Pienso que Dios dijo ‘ya viviste, ya gozaste, a descansar’”, expresó su hermana. “No se pudo con su anemia, la anemia se lo llevó”, aclaró a las cámaras al lado de su madre, quien no emitió comentarios.

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La hermana de Luis Tippán y su madre, Doña Rosita, en la misa luctuosa por su partida. Foto: Captura de pantalla

En las tomas además se aprecia a los amigos y compañeros de Tippán María del Mar Proaño y Nino Touma, quienes dedicaron unas palabras por la muerte de su colega. También estuvo presente su gran amigo de casi toda la vida, el misólogo Marco Tapia. (I)