Las aspas del icónico cabaré parisino, Moulin Rouge, se desplomaron sin explicación durante la madrugada de este jueves.

Las letras M, O y U de su nombre, situadas en la fachada, también cayeron, pero no hubo heridos ni hay riesgo de otro colapso en la estructura del inmueble, según los bomberos.

La empresa propietaria indicó que “es la primera vez que se produce un accidente de este tipo desde la fundación del Moulin Rouge, el 6 de octubre de 1889″, y hasta ahora no tienen “ninguna explicación sobre lo ocurrido en este momento”.

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Según Fanny Rabasse, vocera del Moulin Rouge, “las alas están muy bien mantenidas”, y son revisadas por un mecánico cada semana.

El Moulin Rouge, ícono de París

Este establecimiento, que cumplirá 135 años el 6 de octubre, está situado a los pies de la turística colina de Montmartre, en el norte de París, y en el corazón del animado barrio de Pigalle.

Sinónimo de las desenfrenadas noches parisinas junto al Lido y sus bailarinas de cancán, atrae cada día a miles de visitantes de todo el mundo, que se fotografían ante su fachada.

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Fachada del Moulin Rouge. Foto: Dimitar DILKOFF / AFP

Sus espectáculos de bailarinas en enaguas y volantes, en la estela de leyendas como La Goulue, la Môme Fromage, Nini Pattes en l’air y Mistinguett, hicieron famosa a esta institución.

La película musical “Moulin Rouge” de Baz Luhrmann en 2001, protagonizada por Nicole Kidman y Ewan Mc Gregor, reforzó su interés internacional.

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El Moulin Rouge acoge a 600.000 espectadores al año, con dos representaciones cada noche, 365 días al año, y emplea a unos 450 trabajadores. (I)